Elizabeth Mercado

Nacida en San Luis Potosí, México, Elizabeth tuvo una infancia muy divertida, ya que al ser la cuarta de cinco hermanos, nunca faltaban los chistes, las risas y los juegos. “Mi mamá nos enseñó a ser muy dedicados y comprometidos en lo que elegíamos hacer. Por otro lado, mi papá nos inculcó muchísimo el deporte y la aventura, siempre íbamos a acampar y a caminar a los cerros. Éramos muy unidos entre hermanos, y nos enseñaron a siempre defendernos y cuidarnos entre nosotros. Fue realmente maravillosa mi infancia”.

Estudió la carrera de Psicología y se certificó como orientadora existencial. “Lo que me motivó a estudiar esa carrera fue que en esos momentos de mi vida mis papás se divorciaron y mi familia se separó un poco, y la única materia en la prepa que me ilusionaba era Psicología. Se me hacía impresionante que dentro de cada uno de nosotros haya todo un mundo lleno de conexiones, caminos y aprendizajes que marcan una personalidad y ciertas decisiones. E involucrarme en eso me hacía sentir mejor y comprender la etapa familiar por la que estaba pasando”.

Hace 5 años el universo la trajo a Playa del Carmen, huyendo en parte del ruido de la ciudad. “De aquí me gusta la naturaleza, la sencillez de las personas, la variedad de pensamientos y creencias de la gente. ¡Me encanta la diversidad!”

Actualmente Elizabeth da terapias cada día. Y, de vez en cuando, hace retiros, conferencias, talleres, etc. Sin embargo, desde pequeña comenzó a escribir sobre cómo se sentía internamente y a hacerse preguntas que la llevaron a crear su primer proyecto, Mujer Alpha, que básicamente es un manual con 21 lecciones de autorrealización enfocado a la mujer de hoy en día. Y a escribir su primer libro: Jaula Mental, decorar la jaula no te hace libre. “La escritura comenzó así, escribiendo sobre un estado psicoemocional en el que me encontraba y con un poco de imaginación comencé a darle vida a dos discursos que viven en mi interior (y en el de todos), ese típico ángel y diablo que están indicándonos que sí y que no hacer, sentir, o decir. Jaula Mental, decorar la jaula no te hace libre, fue mi propia manera de escuchar esta dualidad: soy luz como también soy sombra, y el error muchas veces se encuentra en identificarse o querer estar de un único lado. Porque demasiada luz como demasiada sombra son igual de catastróficos, ya que ninguno de los dos te permite ver con claridad. Jaula mental es este recorrido que invita a reconocer primero la jaula en la que tú mismo te has esclavizado, para consecutivamente aprender a dejar de decorarla y comenzar a ver la salida y, de esta forma, vivir con mayor libertad y bienestar”.

Jaula Mental se publicó de forma independiente en el año 2019 y en 2021 bajo la editorial Amazon. Y, hoy en día, puede conseguirse allí, con envíos nacionales e internacionales, al igual que el manual Mujer Alpha. “Estoy por terminar el segundo libro, ya que será una trilogía, el cual se llamará: Jaula Mental, el lado oscuro de la jaula”.

“La única manera de poder transformarnos realmente es mediante la aceptación, de lo contrario solo sería un truco más para cambiarnos, y definitivamente no es lo mismo cambiar que transformar. El cambio incluye la negación y represión de algún aspecto físico, emocional, mental o espiritual decorándolo o modificándolo a nuestra conveniencia. Sin embargo, decorar la jaula no nos hace libres. La transformación es un proceso de aceptación y de valentía para trascender nuestra propia existencia”.

Elizabeth es una persona que sabe abrazar la dualidad de sí misma, del otro y de la vida. “Creo definitivamente que lo que más me destaca es aprovechar la capacidad de aprendizaje que como humanos tenemos. Mi motivación más grande es aprender, ya sea una nueva teoría, un nuevo hobby, deporte, idioma, etc. Creo que lo más cercano a una “misión de vida” es amar y comprometerte con tu proceso. Ser valiente para ser tú, para elegir lo que crees tú que es mejor para ti. Eso sería para mi misión y de ser así, en definitiva, estoy cumpliendo con ella”.

“La vida no te sucede, tú la eliges consciente o inconscientemente”.

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